Un clásico. Hace un par de años hicieron reforma y lo traspasaron. Ha perdido cierta magia, aunque sigue siendo recomendable. Tenía un cuarto que servía de barbería, una de los servicios
más habituales en los antiguos cafés de la isla. Cuando todavía estaba Juanita podías encargarle que te hiciera un arroz brut que era escandalosamente bueno.
No se como se llama ahora, yo le sigo llamando " Ca na Juanita"